Después de casi un mes alimentándome exclusivamente a base de proteína mi cuerpo se ha revelado, me ha dicho que si no le doy gasolina pasa de mi y se declara en huelga y hoy me ha dado un serio aviso por lo que la negociación terminó antes de empezar.
Tras la jornada laboral y utilizando mi coche como vestuario (como últimamente suele ser usual) ¡hay que aprovechar el tiempo al máximo!, me puse la ropa de correr y comencé una tirada de 50' que hoy tocaba.
Salí por una carretera ascendente que sale por detrás de la piscina de Santa Getrudis y comencé a recorrerla cuando, llevaba 25' hice el giro y a retornar al punto de partida, en esos momento noté como el cuerpo me empezaba a dar los primeros avisos de que entraba en reserva, pero seguí hasta completar el tiempo marcado y 9500 metros, continuando con 6 series progresivas de 100m recuperando al trote.
Al finalizar estaban abriendo la piscina así que esa transición la realice en los vestuarios (como mandan lo cánones), allí me encontré con Bartolo que esta preparando su 70.5 de Mallorca y le comenté lo de la rebeldía de mi cuerpo ante la ingesta de proteínas, estando de acuerdo en que no había nada que negociar y que le diese al cuerpo lo que pedía.
Tras 2000 metros de distintos ejercicios de natación, y al salir el cuerpo me dijo que la reserva se acababa en breves momentos, así que tratando de no malgastar la poca energía que me quedaba me duché y salí para mi domicilio.
Nada más llegar abrí un paquete de Tallarines de Kamut y me preparé un plato de éstos acompañado de atún que casi me hacen saltar las lágrimas del disfrute.
Lo dicho ahora que comienzan los entrenamientos a endurecerse hay que cargar glucógeno a tope.
Mañana más y si se puede mejor.
3 comentarios:
Come, come, que te me estas quedando en los huesos.
Con el tute que te pegas hay que alimentarse muy bien, amigo; no lo descuides;
Al final , la comida equilibrada es MUY importante. Y cuando entrenamos mucho hay que darle caña a la pasta!! saludos.
Publicar un comentario